Tal descubrimiento inesperado por los investigadores de la Universidad de San Diego en California, arrojo información sobre como los componentes químicos del mango y los de la marihuana pueden ser capaces de formar una mancuerna perfecta, más que todo para efectos y usos positivos del cannabis, como una planta con propiedades analgésicas, depresivas y de uso recreativo.
En lo que respecta dicho estudio, se pudo descubrir que el mirceno del mango (un carbohidrato monoterpénico linear, principal componente del aceite esencial del mango), puede ser usado como un anti-inflamatorio natural que a su mismo tiempo puede ser utilizado como sedante, hipnótico, analgésico y relajante muscular, además puede alterar la barrera hematoencefálica, para favorecer la entrada de los cannabinoides al cerebro y producir aumento en los efectos.
El mirceno ayuda penetrando en el cerebro más moléculas de THC en menor tiempo, lo que ayuda al fortalecimiento y la prolongación de los efectos psicoactivos del cannabis. Dicho cuerpo reacciona al THC entrante, para así poder ayudarlo a atravesar la barrera fisiológica que se encuentra entre el sistema circulatorio y el sistema nervioso central, de una manera más rápida y eficaz. Independientemente si su uso es medicinal o recreativo, acompañar con mangos el consumo de marihuana puede resultar en una combinación ideal.
