La marihuana con acceso está asociada con la reducción y la incidencia del consumo de opioides y la mortalidad.
En el 2015 el National Bureau of Economic Research arrojo datos en un estudio, el cual dictaminaba “los Estados deben permitir a dispensarios de marihuana medicinal experimentar una disminución relativa entre opioides, adicciones y muertes por sobredosis en comparación a los Estados que no lo hacen.”
Estudios separados también encontraron que el cannabis está asociado con mejores resultados par el tratamiento de temas dependientes con opioides. La redacción de este año en la revista “La dependencia de las drogas y el alcohol”, mostro según los investigadores de la Universidad de Columbia de un “efecto beneficioso por fumar marihuana durante un tratamiento de retención.”
Agregó que, “los participantes que fumaron marihuana tenían menos dificultades conciliando el sueño y ansiedad que los usuarios opiáceos, además tenían más probabilidades de permanecer en tratamiento en comparación con aquellos que no estaban usando la marihuana”.
